miércoles, 1 de junio de 2011

Y los trámites continúan

Vamos avanzando con los trámites pendientes y sigan sacando sus propias conclusiones… si hablamos de Plutón, destino, casualidad, cosas de la vida o como lo quieran llamar.

Les había contado antes que tuvimos que renovar el pasaporte italiano de Alberto para que pueda viajar en un par de semanas a EE.UU.
Para que vayan recordando lo que ya les había contado en alguna publicación anterior a mediados de marzo y según las indicaciones solicitamos ante el Consulado Italiano en Zaragoza, el pasaporte nuevo.  Nos dijeron que en menos de dos meses lo recibiríamos directamente en casa ya que habíamos entregado el sobre amarillo certificado y prepagado para el envío.
Tomando en consideración mis experiencias con los trámites, decidí esperar hasta la segunda semana de mayo (casi los dos meses) y empezar a pedir información sobre la situación del trámite y recordar que ya estaban los boletos comprados para el viaje.

A los pocos días de iniciar la “operación información” y con la ayuda de mis papás que fueron al Consulado para ver que les decían porque yo no me podía comunicar por teléfono y el mail, un misterio de la tecnología, porque la aunque la dirección es correcta, no lo reciben.
Como les decía, a los pocos días de empezar a preguntar, me enviaron un mail indicándome que el 6 de mayo se había solicitado la “Nula Osta” a Italia y que tan pronto respondan emitirían el pasaporte.
Me quedé pensando, ¿si yo fui a la cita el 14 de marzo, qué ha pasado desde ese día hasta el 6 de mayo?  En fin, tenemos que entender que los trámites tienen su propio ritmo.
Seguimos esperando  y el 18 de mayo recibí un mail de Consulado de Italia en Barcelona en italiano.  En ese momento pensaba que no sabía italiano y además de lo nerviosa que estaba, entendía menos.  Pero por suerte una compañera del trabajo sí que sabe italiano y me ayudó a entender.
En el mail me decían que el pasaporte ya estaba emitido y que usando un código que indicaban tenía que sacar cita para ir a Barcelona a recogerlo.
En mi duda desesperación, llamé al Consulado en Zaragoza y se lo comenté, me dijo que así era y que sólo pida la cita por Internet y que si veía que salía algún error, intente hacer a media noche, después de las 12 de la noche para que el “sistema se refresque”.  Aunque entendía el concepto, no entendía del toque por qué.

En fin, con la ayuda de uno de mis primos JRRS, que sí habla italiano, intenté solicitar la cita.  Al llegar al final, donde te aparece un calendario para que elijas el día, salía hasta el 15 de junio “tutto occupato”.  No lo podía creer. ¡Entré en shock!  Alberto tiene el pasaje para el 11 de junio, de que me serviría la cita para el 15? Y además a partir del 15 de junio, el resto de días estaba deshabilitado.
Mi primo, online, me iba tranquilizando diciéndome que debería de ser un error porque no podría hacer que no te permita sacar la cita, pero luego recordé lo de “refrescar el sistema”.
Así que seguí intentando sacar la cita hasta casi la 1 de la madrugada, esperando que se refresque, pero nunca se refrescó.

Al día siguiente, jueves, decidí llamar directamente al Consulado en Barcelona, porque el de Zaragoza sólo trabaja lunes, miércoles y viernes.  Les expliqué el “problema informático” que había en la web y la mujer muy amable me explica que no es ningún problema informático, en realidad no hay citas disponibles hasta el 15 de junio y para intentar obtener una hay que hacerlo a media noche que el “sistema se refresca” y habilita un día más.  ¡Mentira! Yo había estado horas ante la pantalla esperando aparecieran más días disponibles y nada. 
Seguí explicando mi problema, que era una emergencia, que el viaje estaba ya pagado y que mi hijo tenía que viajar, que no podría esperar tanto tiempo que además como mínimo 3 días antes del viaje teníamos que tramitar el visado “ESTA” para poder entrar a EE.UU.
La señorita, con voz amable seguía diciendo “Yo le entiendo señora, pero para el consulado sólo un viaje por muerte y enfermedad se considera emergencia, yo entiendo que para usted tener los pasajes comprados puede ser una emergencia, pero el consulado no lo ve así.  No hay más citas hasta después del 15 de junio”.
Que les puedo decir de lo que sentía en ese momento.  Mi única esperanza era saber que el pasaporte ya estaba emitido, que estaba listo y que si lograba que me atendieran en Barcelona, sólo era cuestión que me lo dé y listo.
De tanto hablar, explicar e insistir la chica me dijo que si Alberto había ido a la cita en Zaragoza el problema estaba resuelto.  Sólo necesitaba que el Cónsul de Zaragoza diga que había hecho un reconocimiento, que “el niño titular del pasaporte corresponde al de la foto” y que como había enviando el sobre amarillo certificado y prepagado me enviarían el pasaporte a casa.  Pensé, ¡Esto está hecho, es verdad, así fue!  Además me sugirió enviara un mail a Barcelona y Zaragoza diciendo esto para que se vayan enterando.

Así que al día siguiente intenté hablar con el Consulado de Zaragoza y me dijeron que ellos se harían cargo de contactar a Barcelona para “dar fe” y que me enviaran el pasaporte.  Me dijeron que esté tranquila que el pasaporte estaba emitido y que sólo era cuestión de enviarlo.

Pues me quedé toda la semana esperando el pasaporte y nada de nada.
Hablé con ellos otra vez preguntando si tenían alguna noticia y la respuesta fue que ya ni ellos se podían comunicar con la oficina de pasaportes de Barcelona y que el Cónsul de acá hablaría con el de Barcelona para ver que pasaba.
Finalmente un par de días después me llamaron para confirmar que enviarían el pasaporte.
El viernes pasado recibimos el aviso de correos y nos fuimos a buscar el pasaporte.

No se pueden imaginar la tranquilidad, felicidad, emoción de tener el pasaporte en mis manos.  Lo abrí con un poco de temor, porque cuando fui a solicitarlo me dijeron que igual mezclaban los apellidos y que sé yo.  Lo vi, lo miré y lo revisé por todas pares,  y me di cuenta que todo estaba bien.
¡Que satisfacción!

Ya he tramitado por Internet el visado “ESTA”.  Así que ahora vamos ultimando algunos detalles que faltan para el viaje, pero en principio se supone que todo está listo para viajar. 
No puedo negar que se me encoje el corazón sólo con la idea de que se vaya solo y luego tanto tiempo lejos y tan lejos.  Pero tengo que aceptar que estoy feliz de la oportunidad que tiene, la posibilidad de estar con su familia, disfrutar a sus abuelos, tías, primos.  Disfrutar a su familia en pleno y además en otro país.  A los 10 años, ¿qué más se puede pedir?
Deseo que tenga un lindo y feliz viaje para él y para toda la gran familia con la que estará.

Ya me dirán entonces: ¿Es normal que pasen tantas cosas cuando una decide hacer algún trámite?
Sobre los papeles italianos de Aitana, aún seguimos esperando que nos confirmen que tiene la nacionalidad italiana para poder tramitar su pasaporte italiano.  Pero por ahora hay tiempo e imagino paciencia.